Entradas

Mostrando las entradas de 2010

El día en que conocí a Leopoldo María Panero

Imagen
Hace algunos años, tantos que no quiero acordarme, mi hermana Clara trajo a un grupo en el que nos reunimos a ver cine una película extraordinaria: un documental, dijo. Pocos intuíamos en ese momento que la película iría a resultar sublime e inolvidable. El desencanto es una película de Jaime Chávarri de 1976 que se centra en una familia emblemática de la España franquista, los Panero. Se trata de una familia compuesta por el padre, Leopoldo, poeta oficial del franquismo, su mujer Felicidad Blanc, finísima señora y sus 3 hijos, Juan Luis, Michi y Leopoldo María. La película es la metáfora perfecta del ascenso y caída del régimen de Franco y sobre todo de la impronta imborrable con sus muchísimos aspectos negativos que dejó en la sociedad española, pero también de sus aspectos que podrían mover a algún tipo de nostalgia incluso en aquellos que, como yo, sentimos siempre simpatías por el bando republicano. Es que esa familia no por fragmentada deja de amarse, no por desigual deja d

La farándula en el Colón

No me interesa machacar demasiado pero para mi lo del Colón fue una mierda. Fue la postal perfecta del país que no quiero que sea. Adentro del teatro había 2500 personas que consiguieron o compraron la entrada por puras cuestiones de privilegio. Susana Gimenez, Valeria Mazza, Mirtha Legrand, Chiche Gelblum, María Laura Santillán, Graciela Borges, Hugo Biolcatti, Ricardo Fort, personas famosas que tienen bien ganada su fama estaban del lado de adentro. Se privilegió en las invitaciones a la farándula mediática. No estaban ni fueron invitadas miles de personas modelo que tienen tanto o más mérito que Susana Gimenez y mil veces más cultura, por decir algo. Por qué estaba invitada Susana Gimenez o Ricardo Fort y no el director del Hospital de Leandro N. Alem de Misiones, por poner un ejemplo. Y si hablamos de fama, por qué no estaba invitada, por ejemplo, Estela de Carloto o Florencia Peña..? O tantos luchadores sociales históricos. O tantos músicos que dedican gran parte de su tiempo a t

Reportaje en Sudamericana

Imagen
SIEMPRE LIBRE EL POLEMICO PROGRAMA DE SUDAMERICANA Francisco Abelenda: "No soy periodista, no soy independiente" Siempre Libre es un programa de radio que va todos los domingos a las 12 por Sudamericana bajo la conducción de Francisco Abelenda, quien, ante las opiniones de varios oyentes que desataron la polémica al manifestarse en contra de cierta tendencia a defender la postura del gobierno nacional, respondió: "No creo que haya que dar muchas explicaciones de porqué uno siente simpatía por el gobierno, no hay que avergonzarse de lo que uno es". "No soy periodista, no soy independiente", aclaró Abelenda al referirse a su actuación en el programa Siempre Libre que se emite por Sudamericana en simultáneo con Radio Palermo de Buenos Aires “En el nombre hay cierta ironía porque uno no puede ser siempre libre, y también hace alusión a la toallitas femeninas con cierto humor”, dijo el conductor al aludir a la denominación. “No creo que haya que dar muchas expl

Programa del 11 de mayo de 2010, para los que no pudieron escucharnos y para los que quieren volver a hacerlo

Kamín Serrano y su lectura de Los profetas del odio

Imagen
Como una forma de agradecimiento por hacerse eco de una nota mía que salió en El Libertador de Corrientes y que puede leerse también en este Blog, me pareció interesante transcribir este artículo del Dr. Carlos Benjamin Serrano, conocido entre los amigos como Kamín (lo vamos a escribir con K) que salió publicado hoy en el mismo diario. Me parece muy interesante la lectura que hace de mi artículo, que a su vez es una lectura de un libro poco citado de don Arturo Jauretche. En su nota Kamín hace también un recorrido por los avateres de la historia del periodismo en Corrientes, siempre tan achicado y en cierto modo marcado de por vida por la sombra inmensa de los porteños. Odiados y admirados por igual, estos profetas del odio (o del amor según el caso) son devastadores en la formación de nuestras consciencias, muchas veces falsas. Debo decir que los comentarios sobre mi están evidentemente exagerados por el afecto. Los profetas del odio por Carlos Benjamín Serrano* Este es el nombre de u

Anticonstitucionalísimamente

Imagen
Durante mucho tiempo, de niño, mis principales lecturas fueron el hispanísimo Diccionario Enciclopédico Hispano-Americano y los libros de Monteiro Lobato de la serie que transcurre alrededor de los personajes de la Quinta del Benteveo Amarillo. En una de las aventuras relatadas por el gran escritor brasileño en su famosa saga, la familia de Doña Benita viajaba al país de la Gramática. En ese país llamaba la atención un gran monumento a la palabra más larga de la lengua: anticonstitucionalísimamente. Honda fue mi decepción al comprobar que esa palabra no figuraba en mi otra fuente de lecturas predilecta. Ya se sabe que mi género preferido siempre fue la enciclopedia, así que atribuí el error a la traducción del libro de Monteiro Lobato, del portugués al castellano, por Ramón Prieto, el legendario adalid desarrollista, quien eligió en la traducción mantener esta palabra, presumiblemente por las resonancias políticas que en ese momento histórico(la década del 50) eran necesarias. H

Los profetas del odio

Imagen
Hoy por la tarde, pensando y pensando, fui a parar a mi biblioteca y por esas cosas de la polisemia, o como se llame a la casualidad que nos lleva a dar con lo inesperado, me encontré con un viejo libro de Arturo Jauretche, Los profetas del odio , editado en 1956. El movimiento que en 1955 llevó al golpe militar contra el gobierno de Juan Perón tuvo de todo, militares liberales, comunistas, gente común de clase media, periodistas... Sin embargo, contra lo esperable, como lo advierte Jauretche en su entrañable libro, la Revolución Libertadora (como se autodenominó) contaba con una pléyade de intelectuales que ponían sus ideas, sus voces y sus textos al servicio de la Fusiladora (como la llamaron sus víctimas). Ezequiel Martinez Estrada, Eduardo Mallea, Jorge Luis Borges y hasta Ernesto Sábato se pusieron al servicio del gobierno de facto y, sobre todo, colaboraron ampliamente para generar las condiciones y el marco conceptual que permitieron el golpe. Es sorprendente cómo los escritos d

¿Vana esperanza?

Imagen
La crisis del gobierno de Cristina Kirchner a poco de asumir y con el voto contrario al gobierno del vicepresidente de la Nación en la batalla por las retenciones móviles dejó el sabor amargo de lo que se avizoraba como una debacle para el proyecto iniciado por la presidencia de Néstor Kirchner en 2003. Poco a poco una carga mediática desmesurada e inédita dejó la sensación de que se trataba de una pérdida de prestigio irremontable y que los años que quedaban de gobierno para Cristina serían un calvario para un gobierno carente en absoluto de influencia en la opinión pública. Las elecciones de junio de 2008, con la derrota de Néstor Kirchner en la provincia de Buenos Aires, siguieron en ese camino desolador para las huestes oficialistas. A partir de ese momento se instaló en la sociedad una idea curiosa: los únicos adherentes al proyecto kirchnerista eran militantes rentados (a bajo precio con el famoso choripán), los cambiantes barones del conurbano, algún piquetero exaltado atado a l